Notas del Pastor MJ: Cuando no sabemos cómo orar

¿Alguna vez te has preguntado por qué te está pasando lo que te está pasando?  Realmente es una pregunta retórica pues sé que todos lo hemos hecho.  Hay tiempos en los cuales nuestro escenario es difícil de asimilar.  Puedes llegar a sentir como si tu mente y tu corazón no tuvieran más espacio para poder procesar otra noticia más, otro evento más, otro asunto más.  Lo más complicado es que cuando esos tiempos llegan se hace difícil articular con tus palabras formas y maneras para hablar con Dios.  ¿Cómo uno ora en medio de esas circunstancias?

Lo hermoso de la oración es que tiene muchos misterios.  Es impresionante que algo que se supone que hagamos a diario tenga cada día cosas nuevas para descubrir.  Una de esas cosas para descubrir es precisamente cómo orar cuando no sabemos cómo orar.  Cuando tu mente no da para más, cuando tus fuerzas y tu corazón están muy comprometidos y sientes que no tienes la capacidad de orar de forma correcta, Dios puede ayudarte a orar.   Tu puedes ir delante de la presencia de Dios y decirle: “Dios dime como orar frente a esta situación”.  Es como ir a dónde el profesor y pedirle la clave del examen antes de tomarlo.  Dios puede dirigirte en tu oración para que tu clamor pueda resultar en lo que tu necesitas, en medio del escenario que estás enfrentando.

Si haces eso, tienes que estar listo, lista para que de tus labios salgan cosas que no necesariamente estabas planificando decir.  Te vas a encontrar pidiendo misericordia por aquellos que no la merecen.  Te vas a encontrar pidiendo Fe para creer en medio de tu duda. Te vas a encontrar pidiendo fuerzas para caminar cuando realmente quieres tirar la toalla.  Vas a encontrarte pidiendo por la gracia y sabiduría para hacer lo que más gloria le dé a Dios, en medio de tus circunstancias.  Pero si Dios te dirige a orar de esa forma es porque él sabe que en esto hay bendición.  La Biblia dice lo siguiente acerca del clamor en tiempos de angustia:


En los tiempos de angustia no siempre vamos a poder tener a flor de labios la oración adecuada.  Pero independientemente, Dios en su Palabra ha prometido que siempre va a escuchar ese clamor.  De modo que puedes ir con toda confianza y decirle a Dios “Tu sabes lo que yo necesito decirte.  Pon tus palabras en mi corazón, para poder hablar contigo de forma correcta”.  Mientras clamas de esa forma él te va a visitar con su paz.