Notas del Pastor MJ: El obrar de Dios

¿Qué sucede cuando tal parece que Dios no está presente? Son muchos los momentos en los cuales nos podemos sentir así.  En muchas ocasiones podemos sentir que Dios no  está por las experiencias abrumadoras que nos rodean.  Estas experiencias pueden funcionar como una neblina que impide que veamos con claridad la presencia de Dios en nuestras vidas.  Pero aún en medio de esos eventos podemos ver las señales de la operación de Dios a favor nuestro.  Hay un libro de la Biblia que trata en su totalidad acerca de esto.  Este libro de la Biblia es uno de los más curiosos porque Dios no aparece en él. De hecho, ni siquiera se menciona su nombre.  Pero a través de todo este escrito se ven las señales de la mano de Dios mientras operaba a favor de su pueblo.


Este verso relata un giro total de la narrativa de hostilidad que había en contra de Mardoqueo quien representaba al pueblo Judío.  ¿Cómo es que esto sucede?  La respuesta es un misterio.  De repente el rey Asuero, un rey dado a la bebida y a iniciativas desmedidas e irracionales se quedó sin sueño.  Para poder contrarrestar su desvelo envía a que le lean las crónicas más recientes de su imperio y es ahí cuando recuerda un gran favor que le hizo Mardoqueo al descubrir un complot para matarle.  En ese momento el rey decide que era menester honrar a Mardoqueo y le delega esta tarea a la persona que quería humillarle y eliminarle, Amán.  Este fue el principio del fin para Amán y para toda su estrategia genocida para el pueblo Judío esparcido sobre la faz del imperio de Media y Persia.
 
Esta es una historia increíble pero que muestra el obrar de Dios, aún en medio de los tiempos en los cuales parece ser que él no está presente.  No hubo un profeta en esta historia, ni un pastor ni la participación de un sacerdote que hiciera sacrificios de ofrenda a nombre del pueblo.  Pero Dios obró a favor de los suyos.  Lo mismo puede hacer contigo y conmigo.  En ocasiones puede parecer que Dios no está y que no hay señales de su presencia en el horizonte.  Pero si prestas atención vas a ver las señales de su favor para contigo.  Aunque Dios no parezca estar cerca, aunque no se mencione su nombre y aunque las circunstancias parezcan ir de mal en peor, Dios siempre está presente y con su mano poderosa ha prometido salvación para sus hijos.  El nunca nos ha dejado y no nos dejará.