Notas del Pastor MJ: Deja los corajes a un lado

Cuando de iras y corajes se trata, la Biblia parece ser muy clara; nos toca a nosotros desechar todo eso.  Si; la Palabra nos asigna una responsabilidad clara y precisa con relación a este tema.


Si te fijas, este verso no dice que Dios va a quitarte el coraje.  Te toca a ti dejar todo eso a un lado.  Ahora bien, hay un detalle muy importante.  La ira y el enojo no son emociones que germinan por sí solas.  Siempre hay una emoción que antecede al coraje y que lo provoca, o al menos abona a que se anide en tu corazón.  Hay veces que puede ser una combinación de varios factores.  Pero casi siempre el coraje nace de experiencias que provocan que reacciones o que sientas de distintas formas.   Estas reacciones y sentimientos a su vez producen emociones que pueden conducirte al enojo.  Por ejemplo, el coraje que llevas a cuestas pudo haber sido provocado por una decepción, por un dolor, por un sentido de abandono, por un sentido de vergüenza o por una injusticia; entre otras cosas.  Entonces se hace vital el poder identificar, cual es la causa de tu coraje.  No quiero obviar que en ocasiones esto requiere asistencia y ayuda profesional, no solamente para dar con la raíz causa del coraje, sino también para manejar todo lo que pueda resultar de ese inventario.  Pero en otras ocasiones, es bastante sencillo.  La pregunta que debes hacerte es la siguiente ¿Cuál es la fuente de ese coraje que llevas por dentro?

Ahora bien, lo más hermoso de todo esto es que Dios sí ha prometido ayudarte a trabajar todas aquellas emociones que pueden estar provocando que tengas ira en tu corazón.  ¿Te han decepcionado?  Dios te ama y nunca te va a defraudar.  ¿Te han herido?  Dios está contigo y puede sanar tu corazón.  ¿Te han abandonado? Dios está contigo y nunca te dejará. ¿Te han dejado en vergüenza? Dios es quien levanta tu cabeza y es tu gloria.  ¿Has experimentado injusticia? Dios es quien defiende a los justos y es quien te honra.

Es entonces que puedes darte cuenta de que para desechar la ira y el enojo debes venir a los pies del Señor.  El dejar la ira y el enojo es un ejercicio de reconocer que necesitas de la intervención del cielo en tu vida, para sanidad y restauración.  Cuando la Biblia dice que deseches el coraje, realmente te está invitando a venir con todas esas emociones que lo causaron, para rendirlas a los pies del Señor.  Haciendo esto vas a poder hallar paz, salud y gozo para vivir con libertad.  Es tiempo de dejar los corajes a un lado.