922 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 15 de octubre de 2023

922 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII •  15 de octubre de 2023
Una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo de generación en generación
 
Los trágicos acontecimientos que el mundo ha tenido que contemplar durante los días recientes han puesto en relieve los niveles de maldad y de insensibilidad que pueden entenebrecer y esclavizar a los seres humanos. Una franja de terreno de 25 millas de largo y entre 3 a 7 millas de ancho ha desatado unos eventos que han conmocionado y estremecido al planeta. Estos eventos han provocado que una porción de las Sagradas Escrituras haya sobrecogido nuestros pensamientos:

“¿Por qué se alborotan los pueblos paganos? ¿Por qué hacen planes sin sentido? 2 Los reyes y gobernantes de la tierra se rebelan, y juntos conspiran contra el Señor y su rey escogido.”
(Sal 2:1-2, DHH)

La masacre de infantes, de niños, las evidencias gráficas de madres quemadas vivas frente a sus hijos y de hijos quemados y/o decapitados frente a sus progenitores, coloca los niveles de maldad y de odio de estos hechos en la dimensión de lo incomprensible. Uno de los aspectos más tristes acerca de esto es que hay pasajes bíblicos que narran y describen esta clase de tragedias inhumanas y que muchas personas que las han leído, incluyendo teólogos, llegaron a creer que la Biblia exageraba con estas descripciones.[1] Una enseñanza que se desprende de esta aseveración es que es obvio que los seres humanos no hemos aprendido mucho en los últimos milenios de nuestra historia.

Como si esto fuera poco, tenemos reacciones de algunos grupos estudiantiles en algunas de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos y en ciudades principales del planeta. Expresiones como “gas de Jews” (lleven a los Judíos a las cámaras de gas), confirman que la maldad y el odio que condujo al planeta al genocidio que ocurrió en la Segunda Guerra Mundial continúan reinando. Al mismo tiempo, las respuestas de grupos políticos en algunas ciudades del llamado primer mundo. Por ejemplo, nos han estremecido las opiniones de algunos congresistas y senadores Norteamericanos con el apoyo que algunos de sus compañeros le han dado a esto que ha hecho el grupo Hamas. Algunos de estos expresaron que sus compañeros tenían derecho a pensar así porque son Palestinos.

Una pregunta que se queda en el tintero es ¿cómo reaccionarían esos grupos que protestan en contra de Israel si lo que está sucediendo en el Medio Oriente se comenzara a experimentar en las ciudades en las que ellos viven?

Es muy curioso el hecho de que muchos de los grupos Norteamericanos que han condenado a Israel en los días recientes, han sido capaces de catalogar como racistas cualquier expresión que contenga una “scintilla” de crítica contra ellos. Sin embargo, no parece temblarle el pulso para enarbolar expresiones anti semitas y hasta pedir la muerte del pueblo Judío.

Tenemos que hacer la salvedad de que estamos opuestos a las guerras y al uso de la violencia, vengan de donde vengan. Neville Chamberlain, otrora Primer Ministro Británico, decía que no hay ganadores en un conflicto armado.

“In war, whichever side may call itself the victor, there are no winners, but all are losers.”[2]
 
Repetimos que nadie gana en un conflicto armado. Aún aquellos que se pueden declararse
victoriosos en un conflicto armado, tienen que sepultar sus muertos y enfrentarse a las tragedias que estos conflictos traen consigo.

Esta reflexión no estaría completa si no nos detenemos a analizar, aunque sea superficialmente, la historia del conflicto entre el grupo Hamas y el pueblo de Israel. Comenzamos señalando que este problema en el Medio Oriente no ha sido causado por los Palestinos y sí por los líderes políticos que los gobiernan. Además, que nosotros reconocemos la complejidad del problema existente en la franja de Gaza. No existen explicaciones sencillas para este problema. No obstante y sin querer sonar simplistas, comenzaremos el repaso de la historia de esa región desde el momento en el que los Británicos tomaron el control del Medio Oriente de la mano del remanente de la hegemonía de los Otomanos. Esto ocurrió en el año 1917. Ese “Mandato Británico sobre Palestina” se extendió hasta el 1948; fecha de la resolución 181 de las Naciones Unidas del 29 de noviembre de 1947.[3] Fue en ese año que este organismo internacional decidió reconocer el Estado de Israel (14 de mayo de 1948).
 
El pueblo Judío venía así a aposentarse a la tierra que sus padres habían habitado por muchos siglos, luego de haber sido víctimas del genocidio desatado por las fuerzas políticas y militares dirigidas por Adolfo Hitler entre 1933 y 1945. Más de 6 millones de judíos, incluyendo 1.5 millones de niños, habían sido exterminados en los campos de concentración. Las atrocidades cometidas por los nazis en esos campos fueron tan descabelladas y atroces[4] que llevaron a algunas personas a pensar que era imposible que algo así hubiera sucedido. Las evidencias gráficas que el mundo ha contemplado en los días recientes comprueban que el corazón de algunos seres humanos puede albergar esos niveles de maldad y mucho más.
 
La decisión de las Naciones Unidas de reconocer el Estado de Israel provocó que todas las naciones vecinas del nuevo Estado Judío le declararan la guerra en 1948, procurando así la destrucción de la “nueva nación.”

Los Palestinos le pusieron un nombre a ese conflicto: “Nakba” (catástrofe)[5]. Hay que entender que ese nombre surge porque esa guerra provocó el desplazamiento de cerca de 800 mil habitantes de esa región. Es a esto que los Palestinos le llaman “al Nakba.”[6] Debemos enfatizar que este desplazamiento no fue provocado por Israel, y sí por los resultados de la guerra en contra del pueblo del Señor. El Señor defendió a Su Pueblo: defendió a su tórtola, como dice el salmista (Sal 74:19). Ese desplazamiento de los Palestinos se produjo hacia la franja de Gaza, hacia el Banco Occidental, Jordania, el Líbano y hacia Siria.

Del estudio de la historia de esa región se desprende que fueron los Egipcios los que administraron la franja de Gaza desde 1948 a 1959. Esto lo hicieron a través de un gobierno palestino simbólico. Sin embargo, fueron los mismos Egipcios los que decidieron imponerle un gobierno militar a esa franja de 1959 a 1967.[7] O sea, que la población de Gaza no contó con un gobierno propio ni con su libertad durante todo ese tiempo.
 
El año 1967 sorprendió al mundo con la tercera guerra entre árabes e Israelíes. La segunda había ocurrido en 1956 y la cuarta, la del Yom Kippur, ocurriría en 1973. La nación de Israel desarrolló lo que se conoce como la Guerra de los Seis Días en 1967. Ese conflicto le permitió al Pueblo de Israel recuperar la ciudad de Jerusalén y obtener el dominio de varias zonas de la región. Entre estas zonas se encuentra la franja de Gaza y el Banco Occidental.[8]  Algunas de las zonas capturadas tuvieron que ser devueltas debido a la presión de la comunidad internacional.[9]
 
Nadie puede ocultar el hecho de que los conflictos en el Medio Oriente han sido frecuentes y
constantes. Los intentos para desarrollar acuerdos y tratados de paz entre las partes han sido muchos. Dentro de las figuras Palestinas más prominentes en todos estos procesos encontramos a Yasser Arafat (1929-2004)[10]. Dentro de las figuras más prominentes del lado Israelí encontramos a Yitzhak Rabin (1922-1995)[11] y a Shimon Peres (1923-2016)[12]. Estos tres (3) recibieron el premio Nobel de la Paz en 1994 por sus ejecutorias en busca de la paz del Medio Oriente.
 
Hay que reseñar que los acuerdos a los que todas las partes han llegado en todos estos años nunca han durado mucho tiempo.

No obstante, el gobierno de Israel accedió el 16 de febrero de 2005 a que la franja de Gaza, así como al Banco Occidental pudieran desarrollar su propio gobierno, algo que nunca antes les había sido concedido a los habitantes de ese lugar. Muchos expertos indican que este fue el inicio formal del “Palestinian National Authority” (Autoridad Nacional de Palestina).[13]

Las luchas políticas y cuasi militares para conseguir la jefatura política de la franja de Gaza no se hicieron esperar. Las más notables, la lucha entre del grupo Fatah[14], dirigido por Mahmoud Abbas y el grupo Hamas[15], fundado por Sheikh Ahmed Yassin y cuyo jefe político actual es Ismail Haniyeh.[16] Este último no reside en Gaza, sino en la ciudad de Doha, en Qatar. Una de las diferencias entre estos grupos es que Fatah es un grupo secular mientras que Hamas es uno islámico.[17] El grupo Hamas ganó ese conflicto político en el 2007 y desde entonces controla el gobierno de Gaza.

Debemos señalar que el Pacto de Hamas (Hamas Covenant, 1988)[18] dice en el segundo párrafo lo siguiente: “Israel will exist and will continue to exist until Islam will obliterate it, just as it obliterated others before it" (The Martyr, Imam Hassan al-Banna, of blessed memory).”En otras palabras, que la finalidad de Hamas no es la de gobernar la franja de Gaza. Su finalidad es la destrucción de Israel.  

Hay que puntualizar que las motivaciones que pueda tener el grupo que ha producido todas estas atrocidades no justifican las acciones despiadadas e inhumanas que el mundo ha tenido que contemplar en los días recientes. Las reacciones de aquellos que han salido en la defensa de Hamas nos conminan a aceptar que el principado de la maldad que inspiró el nazismo, continúa vivo en este tiempo, pero con otros apellidos. Los principios bíblicos lo subrayan así:

“2 Antes en el corazón maquináis iniquidades; Hacéis pesar la violencia de vuestras manos en la tierra.” (Sal 58:2, RV1960)

“11 Cuando no se castiga enseguida un delito, la gente siente que no hay peligro en cometer maldades.” (Ecl 8:10, NTV)

Ahora bien, sabemos que todo lo antes expuesto puede generar muchas preguntas y que para la mayoría de estas no existe una respuesta sencilla o racional. Reconocemos que la crisis que vivimos en el planeta a raíz de los acontecimientos que se viven en el Medio Oriente, es capaz de rasgar el corazón de cualquier ser humano que tenga sentimientos y que crea en la “sacramentalidad” de la vida.

Se levantan preguntas tales como: ¿por qué suceden estas cosas? y/o ¿en dónde está Dios en medio de todas estas tragedias? Admitimos que no hay respuestas sencillas para estas preguntas.

Quizás debemos comenzar señalando que Dios no es el responsable de estas tragedias. Él nos ha dado libre albedrío y todos nosotros tendremos que responderle por lo que hacemos y por las consecuencias de ello.

Sabemos que esta respuesta nunca será suficiente para satisfacer los efectos de los dolores que sufrimos ante las tragedias que no nos hacen sentido. El salmista parece haber atravesado por una situación similar cuando dijo lo siguiente:

“16 Cuando pensé para saber esto, fue duro trabajo para mí, 17 Hasta que entrando en el santuario de Dios, comprendí el fin de ellos.”  (Sal 73:16, RV 1960)

La Biblia dice que nada de esto se hace desde la ignorancia. Dicho de otra manera, todos nosotros somos responsables de nuestros actos y de las consecuencias que estos acarrean:

“1 Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, e hicieron abominable maldad; No hay quien haga bien. 2 Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres, Para ver si había algún entendido Que buscara a Dios. 3 Cada uno se había vuelto atrás; todos se habían corrompido; No hay quien haga lo bueno, no hay ni aun uno. 4 ¿No tienen conocimiento todos los que hacen iniquidad, Que devoran a mi pueblo como si comiesen pan, Y a Dios no invocan?” (Sal 53:1-4)

Así como nos hemos detenido a mirar superficialmente la historia de este conflicto, así también debemos detenernos a mirar parte de la historia de Israel. Comenzamos por las tragedias más recientes que este pueblo ha tenido que experimentar y algunas de las maneras en las que los Israelíes han decidido trabajar con estas.

Por ejemplo, el Holocausto producido durante la época de la Segunda Guerra Mundial condujo a los Israelíes a construir un museo. “Yad Vashem” es el nombre en hebreo del Museo del Holocausto. Muchos de nosotros hemos tenido la oportunidad de visitar el que está localizado en la colina de “Har Hazikaron” (colina de la conmemoración o de la recordación), al oeste de la ciudad de Jerusalén. El nombre de ese museo significa  “un memorial y un nombre.” Este nombre proviene de una cita del Libro del profeta Isaías. En ese pasaje bíblico el Señor le dice a los hijos de Su pueblo que les daría “un nombre eterno, que no será olvidado” (Isa 56:5, NTV).[19]
 
En el muro que sirve como entrada al Museo del Holocausto aparece una cita del Profeta Ezequiel (Ezeq 37:9): “Espíritu, ven de los cuatro vientos y sopla sobre estos muertos y vivirán.” La cita del libro de Ezequiel se usa con dos (2) propósitos. El primero no es el de honrar a los muertos y sí de una advertencia a la humanidad de que los genocidios no deben repetirse. El segundo, que Dios levantó a Israel como nación de las mismas garras de la muerte.

En el idioma de Golda Meir (1898-1978), otrora Primer Ministro de Israel:[20] fue Dios el que afirmó que el pueblo de Israel regresaría a esa tierra (Isa 49:22-26; 60:4-5, y otros), y que ellos volverían a ser establecidos como nación en un solo día (Isa 66:8). En medio de uno de los muchos conflictos que Israel ha tenido que enfrentar, esta mujer se levantó y le dijo al planeta que los Israelíes no tenían otro lugar en el planeta al que pudieran irse. En otras palabras, el pueblo de Israel está convencido de que esa tierra es suya y que no la pueden dejar.

Hay unos datos históricos que no podemos soslayar; tienen que ser incluidos aquí. El pueblo de Israel celebró su primera Pascua para salir de la esclavitud en Egipto a mitad del segundo milenio antes de Cristo (Éxo 12:1-27). Luego de esa Pascua y durante casi 3600 años ese pueblo sobrevivió al Faraón, al cautiverio del rey de Babilonia y al del rey de Media y Persia. Ese pueblo sobrevivió a las invasiones de los Griegos y de los Romanos. Es pueblo sobrevivió al exilio de su tierra por casi 1878 años. Ese pueblo sobrevivió a la inquisición española, a las masacres (“pogroms”) en Rusia, a Adolfo Hitler y al Holocausto. Ese pueblo también ha sobrevivido a cuatro guerras contra los ejércitos de los países árabes. Ninguna nación en la historia posee esa hoja de vida.

Es interesante el hecho de que el Grupo Hamás los haya atacado durante la celebración de uno de las fiestas religiosas más importantes del año (Simchat Torah).[21]
 
Ahora bien, ¿cómo debe responder la Iglesia del Señor ante una crisis como esta? La Iglesia del Señor ha sido llamada a brillar en medio de cualquier crisis. El profeta Zacarías es uno de los que nos señala la ruta a seguir para saber cómo enfrentar esta y cualquier otra clase de crisis en la vida.

“6 Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos.” (Zac 4:6)

La oferta de Zacarías es sencilla: tenemos que ser dirigidos por el Espíritu y operar empoderados por Él. Planteamos en nuestra reflexión anterior que una Iglesia que es dirigida por el Espíritu posee unas   características muy particulares. Estas características forman parte del empoderamiento de la Iglesia y la de la capacitación para enfrentar cualquier escenario en la vida.

Mencionamos allí que existen siete dimensiones en la vida de un discípulo del Señor (y de una iglesia) que tienen que verse afectadas por la dirección del Espíritu Santo. Una Iglesia que no ve que estas dimensiones están siendo afectadas y retadas constantemente para crecer, necesita revisar el lugar que se le ha concedido al Espíritu de Dios.

 Estas dimensiones son:
 
El lugar y el uso de la Biblia como Palabra de Dios y regla de fe y conducta del creyente.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida calibrando y catalogando estas con los lentes bíblicos. No se trata únicamente de la perspectiva profética que puedan o no poseer los escenarios que vivimos. Se trata también de la conducta que se espera de nosotros frente a cualquier situación que enfrentamos en la vida (Col 3:23-24).

El lugar y el uso de la oración.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida acudiendo a la oración como la herramienta divina, no solo para cambiar las circunstancias (Stgo 5:16), sino como una herramienta celestial para que seamos fortalecidos y transformados en medio de cualquier situación,  por conflictiva que esta pueda ser (Stgo 5:15).

El lugar de la adoración.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida echando mano de la adoración, no solo como una herramienta que nos permite responder a la presencia de Dios en Cristo, sino como un arma que hace silenciar a las fuerzas de las tinieblas (2 Cró 20:17-22) y que nos permite disfrutar de la presencia de Dios (Sal 22:3).  

El lugar del servicio del creyente.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida echando mano del mandato a servir al que ella ha sido llamada (Prov 25:21-22; Rom 12:20)

El lugar de la misión del creyente.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida echando mano del llamado misionero que Dios nos ha hecho (Jer 26:2-3; Eze 2:5, 7; 3:11; Mat 28:18-20).

El lugar de la generosidad del creyente.

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida dirigida por la ética del Reino que Jesús nos enseñó (Lcs 6: 29-3).

El lugar de la persona del Espíritu Santo.[22]  

Una Iglesia dirigida por el Espíritu se acerca a las experiencias y a las situaciones que nos trae la vida sabiendo quién es el Espíritu Santo.

Hay un pasaje bíblico con el que queremos cerrar esta reflexión. Este pasaje será rector de todos nuestros planes de trabajo durante el próximo año.

“41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. 43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. 44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; 45 y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. 46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, 47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.” (Hch 2:41–47, RV1960)

A continuación un resumen fugaz de este pasaje, aplicado a las realidades que experimentamos en esta temporada. Este pasaje describe cinco funciones de la Iglesia que son impactadas por la presencia del Espíritu de Dios cuando este es el que dirige la Iglesia.

La primera de estas es que una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo es una Iglesia que experimenta la transformación de la función de la evangelización. La Iglesia que es dirigida por el Espíritu Santo posee pasión por la evangelización de los no alcanzados. El verso 41del pasaje bíblico antes citado señala que el pueblo estaba recibiendo el mensaje de la Palabra y que esto les conminaba a querer ser bautizados.

La segunda función es que una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo es una Iglesia que
experimenta la transformación de sus programas de discipulado. El verso 42 de ese pasaje bíblico enfatiza la celebración de la ordenanza del bautismo.

La tercera función es que una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo es una Iglesia que experimenta la transformación de sus programas misioneros y de servicio. El verso 45 de ese pasaje bíblico dice que la Iglesia atendía las necesidades de aquellos que adoraban en esa comunidad de fe.
 
La cuarta función es que una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo es una Iglesia que experimenta la intensificación de la comunión de los creyentes. El verso 46 de este pasaje bíblico dice que esa iglesia se mantenía “…. perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón.”

La quinta función es que una Iglesia dirigida por el Espíritu Santo es una Iglesia que posee una adoración transformadora:
El verso 47 del capítulo dos del Libro de Los Hechos dice que  la Iglesia que fue impactada por el Espíritu Santo el día de Pentecostés  vive “47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo.”

Estas funciones son vitales para poder responder correctamente a todos aquellos que demanden razón de nuestra fe (1 Ped 3:15) o que se acerquen a nosotros para recibir palabras de aliento o de dirección de cara a las tragedias de las que hemos sido hechos testigos.

Concluimos esta reflexión  reconociendo que no sabemos cuánto tiempo durará este conflicto.Tampoco sabemos que si este permanecerá limitado a la franja de Gaza o si se extenderá a otras partes. Lo que sí sabemos es que el Señor no ha dejado de estar en Su trono. Dios sigue gobernando y revelándose sobre toda la tierra. Es muy probable que cuando este conflicto concluya estemos viendo un mapa geopolítico distinto al que teníamos. La respuesta bíblica continuará teniendo la razón por encima de cualquier resultado al que este conflicto pueda llegar: “De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan. Porque él la fundó sobre los mares, Y la afirmó sobre los ríos.” (Sal 24:1-2)

Por último, quisiéramos solo poder apoyarnos en la convicción de que estos eventos anuncian que estamos mucho más cerca de lo que creemos del regreso de Cristo nuestro Señor a buscar a Su pueblo. Creemos que Cristo está a las puertas. Anhelamos que el Señor venga: ¡Ven Señor Jesús! (Apoc 22:20b). El problema con esto es que no podemos abrazarnos a esta solución porque todavía existen muchos pueblos que no hemos alcanzado. Es Dios el que nos conmina a hacerlo dirigidos por su Espíritu.

“14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.”  (Mat 24:14)

Este es sin duda alguna uno de los pasajes bíblicos que sirven como base a la expresión “ya, pero todavía no.” El fin está cerca, pero aún no es el tiempo.

Por lo tanto, las tragedias que hemos contemplado en estos días deben motivarnos a avanzar en la proclamación del mensaje del Evangelio a aquellos que aún no lo han recibido. Estas tragedias nos conminan a dar un testimonio inequívoco de Cristo y de la ética del Reino de los cielos. Estas tragedias nos conminan a hacerlo con prontitud, con celeridad, responsabilidad y dirigidos por el Espíritu Santo.

Esto provocará que llegue el fin.



[1] Algunos ejemplos de esto: Sal 17:8; Lam 4:10; 5:11-13; Am 1:13; Zac 14:2.
[2] En un discurso en Kettering el 3 de Julio de 1938, publicado en Times el 4 de Julio de ese mismo año.
[3] https://israeled.org/wp-content/uploads/2019/11/1947.11.29-UNGA-Resolution-181.pdf
[4] El gobierno Nazi le puso un nombre al plan para exterminar los Judíos: “The Final Solution.”
[5] https://imeu.org/article/quick-facts-the-palestinian-nakba
[6] https://www.un.org/unispal/about-the-nakba/
[7] Todos estos datos han sido tomados de una publicación de la Embajada del Estado Palestino a Australia, Nueva Zelanda y el Pacífico. Ver https://www.palestine-australia.com/about-palestine/historical-and-political-context/
[8] Se le llama así porque ese territorio ocupa el margen occidental del río Jordán.
[9] Una de estas es la Península del Sinaí que pertenece a Egipto.
[10] https://www.nobelprize.org/prizes/peace/1994/arafat/facts/
[11] https://www.britannica.com/biography/Yitzhak-Rabin
[12] https://achievement.org/achiever/shimon-peres/
[13] Creada en los acuerdos de Oslo I en 1993. Desde ese año el PA controlaba algunos sectores del Banco Occidental.  
[14] Fatah es el acrónimo árabe, invertido (reversa), de “Harakat al-Tahrir al-Filistiniya”  (Movimiento de Liberación Nacional Palestino). Fatah en árabe es traducido como conquistar.
[15] Acrónimo de “Harakat al-Muqawama al-Islamiya” (“Movimiento de Resistencia Islámico”)
[16] https://www.pbs.org/newshour/world/what-is-hamas-what-to-know-about-its-origins-leaders-and funding# :~:text=The outcome was unacceptable to, between the two Palestinian territories.
[17] https://www.aljazeera.com/features/2017/10/12/hamas-and-fatah-how-are-the-two-groups-different.
[18] https://avalon.law.yale.edu/20th_century/hamas.asp
[19] https://www.jewishvirtuallibrary.org/yad-vashem
[20] https://www.jewishvirtuallibrary.org/golda-meir
[21] https://www.hillel.org/jewish-traditions-and-holidays/gclid=Cj0KCQjw1aOpBhCOARIsACXYv-eo1EXd7tGuHmlWxQMAnZU7Ond8ZYJdyWQU6wHSkT7_isztUyh6BAUaAsA4EALw_wcB
[22] https://discipleship.ag.org/es-ES/7-Dimensions##