May 26th, 2022
Es normal querer buscar soluciones para atender los problemas que enfrentamos. Es algo que todos practicamos a diario. El problema central es cuando no buscamos la verdadera raíz causa, aquello que ocasionó el problema en un principio. Entonces las soluciones que queremos implementar se convertirán en paliativos temporeros que no evitarán los males recurrentes ni mitigarán nuestro dolor.
Frente a la tragedia de Uvalde en Texas he visto una reacción distinta de parte de los medios, los políticos y el publico en general. “Ya es suficiente”, “Es hora de actuar”, “No quiero acostumbrarme a esto” son frases que se pueden escuchar en todas partes. Cuando vemos un evento tan desgarrador y pensamos en las víctimas y sus familiares definitivamente tenemos que ser movidos a un cambio a nivel social. Pero cuando pensamos en las posibilidades de que esto se pueda repetir y que entonces seamos nosotros los recipientes de semejante dolor, entonces tenemos que comenzar a evaluarnos a nosotros mismos. Lo que estamos haciendo; ¿realmente va a poder solucionar nuestro problema de violencia?
Ciertamente la violencia de este nivel puede ser mitigada con mayores controles, a través de reformas legislativas que han estado en estado inercia por mucho tiempo, producto de intereses políticos y económicos. Pero si indagamos más a fondo, ese estado de violencia no es la raíz causa de nuestro problema, sino un síntoma. ¿Qué es lo que causa semejante violencia en un principio? La respuesta a esa pregunta está en la Palabra.
La Biblia dice “El que sembrare iniquidad, iniquidad segará” (Proverbios 22:8). De una forma bien sencilla, lo que esto quiere decir es que si sembramos violencia vamos a cosechar violencia. Si sembramos violencia en nuestras interacciones, vamos a cosechar violencia en nuestras relaciones. Si sembramos violencia en nuestros medios, vamos a cosechar violencia en nuestra sociedad. Si sembramos violencia en nuestro corazón, vamos a cosechar violencia en nuestros actos.
La semilla de la violencia se puede sembrar de muchas formas y en muchas instancias en el corazón del ser humano. Ciertamente el joven de 18 años que perpetró este acto en la escuela elemental Robb en Uvalde Texas tuvo un acceso a adquirir armas de fuego que nunca debió tener. Pero la intención de su corazón y su estado mental, conductual y espiritual no se gestaron en un vacío ni de forma instantánea. De alguna forma esa semilla de violencia fue sembrada, y luego germinó. Entonces, la pregunta real para formular sería: ¿Cómo podemos atender la raíz causa de nuestro problema social de violencia? La respuesta comienza con cada uno de nosotros.
Esto no es un asunto de terceros, sino un asunto de cada uno, pues cada uno de nosotros tiene la oportunidad de decidir qué va a sembrar en su corazón a diario. Nunca nos pensamos a nosotros mismos como capaces de realizar actos como el de Uvalde Texas. Pero sí somo capaces de generar y promover mucha violencia, violencia que puede resultar en mayor violencia a nivel exponencial. Sin embargo, si a diario le pedimos a Dios que nos ayude a sembrar correctamente, en nuestros corazones, en nuestros hogares y en los que están a nuestro alrededor, entonces podemos comenzar a gestar un cambio.
Pienso que si dedicáramos más tiempo a orar, no de forma reactiva, sino de forma proactiva, podríamos ser mejores. Lo que quiero decir con esto no es algo puramente religioso, sino práctico. Cada día es necesario orar por nuestros corazones para que podamos sembrar de forma correcta, con nuestros actos y con nuestras decisiones. Cada día es necesario orar por nuestros hijos, para que Dios guarde su corazón y que les proteja de aquello que les pueda influenciar a la maldad. Cada día es necesario orar por los que están a nuestro alrededor, nuestros vecinos, nuestros familiares, nuestros compañeros de trabajo. No sabemos las situaciones por las cuales están pasando y de qué manera algún evento de sus vidas les pueda mover a tomar decisiones que tengan consecuencias nefastas para otros. Cada día es necesario orar para que Dios nos ayude a decidir mejor, para ver lo que es correcto, escuchar lo que es correcto, promover lo que es correcto de modo que dejemos de sembrar para la violencia. Si hay algo de lo cual estamos convencidos hoy es que necesitamos un cambio. Pero para que ese cambio ocurra, necesitamos comenzar a mirarnos por dentro.
Frente a la tragedia de Uvalde en Texas he visto una reacción distinta de parte de los medios, los políticos y el publico en general. “Ya es suficiente”, “Es hora de actuar”, “No quiero acostumbrarme a esto” son frases que se pueden escuchar en todas partes. Cuando vemos un evento tan desgarrador y pensamos en las víctimas y sus familiares definitivamente tenemos que ser movidos a un cambio a nivel social. Pero cuando pensamos en las posibilidades de que esto se pueda repetir y que entonces seamos nosotros los recipientes de semejante dolor, entonces tenemos que comenzar a evaluarnos a nosotros mismos. Lo que estamos haciendo; ¿realmente va a poder solucionar nuestro problema de violencia?
Ciertamente la violencia de este nivel puede ser mitigada con mayores controles, a través de reformas legislativas que han estado en estado inercia por mucho tiempo, producto de intereses políticos y económicos. Pero si indagamos más a fondo, ese estado de violencia no es la raíz causa de nuestro problema, sino un síntoma. ¿Qué es lo que causa semejante violencia en un principio? La respuesta a esa pregunta está en la Palabra.
La Biblia dice “El que sembrare iniquidad, iniquidad segará” (Proverbios 22:8). De una forma bien sencilla, lo que esto quiere decir es que si sembramos violencia vamos a cosechar violencia. Si sembramos violencia en nuestras interacciones, vamos a cosechar violencia en nuestras relaciones. Si sembramos violencia en nuestros medios, vamos a cosechar violencia en nuestra sociedad. Si sembramos violencia en nuestro corazón, vamos a cosechar violencia en nuestros actos.
La semilla de la violencia se puede sembrar de muchas formas y en muchas instancias en el corazón del ser humano. Ciertamente el joven de 18 años que perpetró este acto en la escuela elemental Robb en Uvalde Texas tuvo un acceso a adquirir armas de fuego que nunca debió tener. Pero la intención de su corazón y su estado mental, conductual y espiritual no se gestaron en un vacío ni de forma instantánea. De alguna forma esa semilla de violencia fue sembrada, y luego germinó. Entonces, la pregunta real para formular sería: ¿Cómo podemos atender la raíz causa de nuestro problema social de violencia? La respuesta comienza con cada uno de nosotros.
Esto no es un asunto de terceros, sino un asunto de cada uno, pues cada uno de nosotros tiene la oportunidad de decidir qué va a sembrar en su corazón a diario. Nunca nos pensamos a nosotros mismos como capaces de realizar actos como el de Uvalde Texas. Pero sí somo capaces de generar y promover mucha violencia, violencia que puede resultar en mayor violencia a nivel exponencial. Sin embargo, si a diario le pedimos a Dios que nos ayude a sembrar correctamente, en nuestros corazones, en nuestros hogares y en los que están a nuestro alrededor, entonces podemos comenzar a gestar un cambio.
Pienso que si dedicáramos más tiempo a orar, no de forma reactiva, sino de forma proactiva, podríamos ser mejores. Lo que quiero decir con esto no es algo puramente religioso, sino práctico. Cada día es necesario orar por nuestros corazones para que podamos sembrar de forma correcta, con nuestros actos y con nuestras decisiones. Cada día es necesario orar por nuestros hijos, para que Dios guarde su corazón y que les proteja de aquello que les pueda influenciar a la maldad. Cada día es necesario orar por los que están a nuestro alrededor, nuestros vecinos, nuestros familiares, nuestros compañeros de trabajo. No sabemos las situaciones por las cuales están pasando y de qué manera algún evento de sus vidas les pueda mover a tomar decisiones que tengan consecuencias nefastas para otros. Cada día es necesario orar para que Dios nos ayude a decidir mejor, para ver lo que es correcto, escuchar lo que es correcto, promover lo que es correcto de modo que dejemos de sembrar para la violencia. Si hay algo de lo cual estamos convencidos hoy es que necesitamos un cambio. Pero para que ese cambio ocurra, necesitamos comenzar a mirarnos por dentro.
Categories
Archive
2024
January
934 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 7 de enero del 2024935 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 14 de enero del 2024936 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 21 de enero del 2024937 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 28 de enero del 2024
February
938 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 4 de febrero del 2024939 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 11 de febrero del 2024940 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 18 de febrero del 2024941 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 25 de febrero del 2024
March
942 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 3 de marzo del 2024943 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 10 de marzo del 2024944 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 17 de marzo del 2024945 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 24 de marzo del 2024946 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 31 de marzo del 2024
April
947 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 7 de abril del 2024948 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 14 de abril del 2024949 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 21 de abril del 2024950 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 28 de abril del 2024
May
951 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 5 de mayo del 2024952 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 12 de mayo del 2024953 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 19 de mayo del 2024954 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 26 de mayo del 2024
June
955 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 2 de junio del 2024956 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 9 de junio del 2024957 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 16 de junio del 2024958 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 23 de junio del 2024959 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 30 de junio del 2024
July
960 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 7 de julio del 2024961 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 14 de julio del 2024962 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 21 de julio del 2024963 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 28 de julio del 2024Nota pastoral editorial sobre los actos de apertura de los Juegos Olímpicos París 2024
August
964 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 4 de agosto del 2024965 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 11 de agosto del 2024966 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 18 de agosto del 2024967 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 25 de agosto del 2024
September
968 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 1 de septiembre del 2024969 • El Heraldo Digital - Institucional • Volumen XVII • 8 de septiembre del 2024970 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 15 de septiembre del 2024971 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 22 de septiembre del 2024972 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 29 de septiembre del 2024
October
973 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 6 de octubre del 2024974 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 13 de octubre del 2024Celebremos el don inefable que nos ha dado Dios975 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 20 de octubre del 2024976 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 27 de octubre del 2024
November
977 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 3 de noviembre del 2024978 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 10 de noviembre del 2024Carmelina García Pérez “Minín”979 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 17 de noviembre del 2024980 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 24 de noviembre del 2024
2023
January
881 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 1 de enero 2023Reflexiones de Esperanza: La plenitud de Dios: el propósito para la vidaReflexiones de Esperanza: Isaías: El profeta Isaías y su mensajeNotas del Pastor MJ: El año del propósito de Dios882 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 8 de enero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro y el propósito de Dios para nuestras vidasReflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte II)883 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 15 de enero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte III)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte IV)Notas del Pastor MJ: Calma y paz884 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 22 de enero 2023885 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 29 de enero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte V)
February
Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte VI)Notas del Pastor MJ: No dejes pasar la oportunidad.886 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 5 de febrero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte VII)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte VIII)887 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 12 de febrero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte IX)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte X)Notas del Pastor MJ:888 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 19 de febrero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XI)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XII)Notas del Pastor MJ: Paz sinigual889• El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 26 de febrero 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XIII)
March
Notas del Pastor MJ: El te escuchará890 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 5 de MARZO 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte IX)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte X)Notas del Pastor MJ: Como Carbones Encendidos 891 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 12 de MARZO 2023Notas del Pastor MJ: Un Pueblo que Ora892 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 19 de MARZO 2023Notas del Pastor MJ: La Esperanza893 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 26 de MARZO 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XI)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XII)Notas del Pastor MJ: Nuestra Escalera
April
894 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 2 de abril 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje de la cruz: Hay poder en la sangre de CristoReflexiones de Esperanza: El mensaje de la tumba vacía-el poder de la resurrección de JesúsNotas del Pastor MJ: Padre perdónalos895 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 9 de abril 2023Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XIII)Reflexiones de Esperanza: El mensaje del profeta Isaías: conociendo el libro el propósito de Dios para nuestras vidas (Parte XIV)Notas del Pastor MJ: Perdonar
Recent
980 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 24 de noviembre del 2024
November 24th, 2024
979 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 17 de noviembre del 2024
November 17th, 2024
Carmelina García Pérez “Minín”
November 14th, 2024
978 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 10 de noviembre del 2024
November 10th, 2024
977 • El Heraldo Digital – Institucional • Volumen XVII • 3 de noviembre del 2024
November 3rd, 2024
Tags
#vidaamec
AUTOR: MIZRAIM ESQUILIN GARCIA
AUTOR: PASTOR MJ
Editorial AMEC-CDA
Editorial Pastoral
Efesios
El Heraldo
Epistolas Paulinas
Heraldo Digital
Heraldo
Isaias
MIsiones
Navidad 2022
Notas del Pastor MJ
Pastor Mizraim Esquilin
SALMO 23
SALMO 91
SERIE: ALABANZAS PARA EL ALMA: ORACIONES
SERIE: DIOS NOS HABLA EN MEDIO DE LAS CRISIS
SERIE: EL ARCA DEL PACTO
SERIE: EL EXODO - LA VIDA DESPUES DE LAS PLAGAS
SERIE: ENSEÑANZAS EN LA CUEVA
SERIE: ENTRE EL MAR Y LA TIERRA PROMETIDA
SERIE: LOS ANGELES DE DIOS
Serie: El mensaje del profeta IsaÃas
Serie: La Agenda de la Transformación
Serie: La Carta a los Efesios
VidaAMEC
Volumen XVI
Volumen XV
mundo post-COVID
No Comments